Hay muchísimas definiciones de ‘musicoterapia’, casi tantas como musicoterapeutas, aunque parece que la más extendida es: «El uso de la música para mejorar el funcionamiento físico, psicológico, intelectual o social de las personas».
La musicoterapia (MT) es una ciencia de la salud que integra psicología y música con unos fines y objetivos terapéuticos.
A pesar de que la música se ha utilizado con fines terapéuticos desde tiempos ancestrales, no fue hasta 1950 cuando se reconoció como profesión en Estados Unidos.
Desde entonces la MT ha evolucionado a través de investigación y práctica clínica, y actualmente existe un alto consenso en cuanto a la estructura de trabajo a utilizar y los objetivos a seguir entre los muchos músicoterapeutas especializados que hoy en día existen en todo el mundo, a través de diferentes modelos de intervención en musicoterapia
Desde luego, quienes la han probado aseguran que mejoran de sus dolencias, y que alcanzan una agradable sensación de bienestar.
El musicoterapeuta Patxi del Campo aclara algunos de estos aspectos.
-¿Podría darme usted una definición de ‘musicoterapia’?
-El uso de la música como agente terapéutico, como un vía para facilitar al individuo la expresión de sentimientos y emociones.
-¿Cómo puede ayudar la música a paliar el dolor?
-La música siempre se ha utilizado para crear estados de bienestar, tanto físico como emocional.
Nosotros trabajamos con enfermos de fibromialgia, que tienen un dolor permanente; nuestros talleres les ayudan a lograr un mayor bienestar.
O con pacientes con Alzheimer, que en las primeras fases de la enfermedad conservan la memoria más lejana, pero tienen dificultades con los acontecimientos más recientes.
Buscamos músicas que les evoquen el pasado y después empleamos esas canciones para poder incorporar cosas nuevas-
-¿Vale cualquier tipo de melodía?
-Sí. La música es el lenguaje de las emociones. Cada persona se identifica con un estilo musical diferente.
«La sociedad cada vez reclama más su uso», señaló.
España ha sido un país que no ha prestado demasiada atención a la música como terapia, pese a que se ha utilizado con esa función desde los tiempos prehistóricos.
«No se trata sólo de incentivar el goce estético, que también, sino de entender la música como un proceso humano».
«Lo que se pretende es mejorar nuestros receptores sensoriales, que podamos expresar y transmitir mejor nuestras emociones y sensaciones», subrayó el musicoterapeuta.
-Pero esta técnica es útil también para personas sanas.
-Desde luego. Hay momentos en los que las personas entramos en crisis (personal, matrimonial, de edad…), no estamos enfermos, pero nos encontramos mal.
La musicoterapia puede ayudarnos a conectar con nuestros sentimientos, con nuestras emociones, y hacernos ganar autoestima, por ejemplo.
Celeste Viotti Cariño