Nacido en 1961, Rolf Lislevand estudia guitarra clásica en la Academia de Música del Estado de Noruega.
Durante sus estudios toca regularmente la guitarra eléctrica en diversos grupos, y esto le aporta una experiencia provechosa por lo que se refiere a la improvisación, que marcará profundamente su propio lenguaje musical y su relación con la música antigua.
Después entra en la Schola Cantorum Basiliensis donde estudia con Hopkinson Smith y Eugène Dombois antes de ser invitado por Jordi Savall a acompañarlo en sus diversas formaciones Hespèrion XXI, La Capella Reial de Catalunya y Le Concert des Nations.
En 1987 se establece en Verona (Italia) donde intenta reconstruir la manera auténtica de tocar la música italiana de la primera mitad del siglo XVII.
Forma entonces el Ensemble Kapsberger, y a partir de 1993 sus grabaciones aparecen con el sello AUVIDIS/ NAÏVE, las cuales han recibido numerosas distinciones como un “Diapason d’Or 1994”, un MIDEM en Cannes con el título de “Meilleur Disque de musique instrumental d’avant 1650” dedicado a la música de Hieronymus Kapsberger, o el “Critic’s Choice 1995” de Gramophone, Spelemannsprisen, etc.
Con su conjunto Kapsberger propone una nueva concepción artística de la música instrumental del siglo XVII, así como una revisión de la tradición actual de la música antigua.
Su interpretación de las obras de Kapsberger, Santiago de Murcia, Gaspar Sanz y de compositores menos conocidos ha impulsado a toda una nueva generación de instrumentistas.
Rolf Lislevand basa su interpretación del repertorio de laúd y guitarra en un equilibrio sutil entre la investigación musicológica actual, la inspiración y la creatividad de un músico educado musicalmente en el siglo XXI.
Se esfuerza por mantener lo más fielmente posible el estilo que se supone de la época, pero deja espacio para la inspiración y la improvisación cuando faltan las fuentes de información.
Para él, la ausencia de información debe llevar al músico a la inspiración y no a la frustración.
Lislevand reintroduce elementos de ritmo, la improvisación real, un dominio maravilloso de los timbres y del espacio sonoro, y restituye así el valor de una tradición musical antigua para un público actual.
Empujado por su inspiración y su curiosidad, colabora con importantes intérpretes de múltiples horizontes musicales, y trabaja tanto con orquestas barrocas como con músicos de jazz, flamenco, música popular de diversos orígenes, árabes, orientales, y música contemporánea.
Desde 1993 es profesor en la Staatliche Hochschule für Musik en Trossingen (Alemania), y se prodiga por festivales internacionales en Europa, Estados Unidos y Oriente ya sea como solista o como director de su Ensemble Kapsberger.