Recientemente ha llegado al mercado un maravilloso proyecto musical que, fruto de la colaboración de los conjuntos vocales Gradualia y Regina Ibérica, se ha centrado en registrar la música de aquellos doce compositores españoles que el ilustrado Tomás de Iriarte destacó como sobresalientes, dentro de la música patria de todos los tiempos, en su poema La música, escrito en 1779. Se trata del disco Los doce músicos de Iriarte.
Iriarte fue un gran literato de su época, esforzado poeta y apasionado músico, pues tocaba la viola y el violín, y parece ser que hasta compuso una serie de sinfonías que no han llegado hasta nosotros. Probablemente su obra más conocida son las Fábulas literarias (1782), en cuyo prólogo defendía haber inventado este género en nuestro país, un comentario que le valió una larga disputa con Félix María Samaniego que afirmaba haber publicado sus fábulas un año antes.
La música es una composición de silvas estructurada en cinco cantos que tiene un carácter didáctico. Está escrita con un lenguaje claro y directo y tuvo mucho éxito en España y Europa, aunque según Rafael Mitjana es un libro “absolutamente desprovisto de poesía” (entendemos que se refiere a la calidad de los versos). El primer canto trata sobre los elementos de la música -el sonido y el tiempo-, el segundo de la expresión de los sentimientos por medio de la música; en el tercero habla de la dignidad del arte de los sonidos y de los usos a que puede ser dedicado, especialmente al servicio religioso; el cuarto introduce preceptos para su uso en las fiestas y en el teatro; y finalmente, el último trata sobre la música íntima que regocija el alma.
Precisamente, Tomás de Iriarte enumera la lista de los que son a su juicio los doce músicos principales de la música española en el Canto III, al hablar de música religiosa. Posiblemente lo que quería destacar el poeta era aquellos nombres que más habían destacado a su juicio en el empleo de la polifonía y el contrapunto. Los versos que contienen el palmarés son los que siguen:
“¡O cuánto sobresales,
Antigua Iglesia Hispana!
No es ya mi canto, no, quien te celebra,
Sino las misma obras inmortales
De Patiño, Roldán, García, Viana,
De Guerrero, Victoria, Ruiz, Morales,
De Líteres, San-Juan, Durón y Nebra.”
Algunos de los mencionados son directamente identificables, como el trío del siglo XVI formado por Cristobal de Morales, Francisco Guerrero y Tomás Luis de Victoria, lo más granado de nuestro Renacimiento. También nacido en dicho siglo, pero menos conocido, aparece relacionado Vicente García Velcaire (1593-1650).
De los que vieron la luz a principios del siglo XVII cita a Carlos Patiño (1600-1675) y a Juan Pérez Roldán (1604-1672), y ya de la segunda mitad, a Matías Juan de Veana, Sebastián Durón, Fray Matías Ruiz, Antonio de Líteres y José de San Juan. Finalmente, incluye al compositor del siglo XVIII José Nebra.
El disco Los doce músicos de Iriarte se compone de piezas escritas por estos maestros que son interpretadas con gran elegancia por los conjuntos Regina Iberica y Gradualia.
Regina Iberica lo componen la soprano Delia Agúndez y el tenor Víctor Sordo, además de Sara Ruiz a la viola da gamba y Laura Casanova al clave. Por otro lado, Gradualia incluye a la soprano Sandra Cotarelo, a Sonia Gancedo y Ana Cristina Marco como altos, al tenor Javier Carmena, y finalmente, a Simón Andueza como barítono y en la dirección musical.