Siempre es un placer sumergirse en el catálogo de Cantus Records y encontrar maravillas, como la grabación que realizó Ignacio Prego en 2014 de la Suites Francesas de Johann Sebastian Bach.
Se trata de un proyecto grabado en Madrid a principios de 2013, que contiene las seis suites finalizadas en Leipzig en torno a 1725.
Este trabajo supuso la segunda incursión del clavecinista en la obra del compositor alemán, tras Chromatic Fantasy de 2011.
Prego fue calificado por el diario El Mundo como “uno de los músicos españoles más versátiles de la escena clásica”.
Las Suites Francesas BWV 812-817 fueron compuestas en su mayoría durante la estancia de Bach en Köthen, entre 1717 y 1723, un periodo en que el maestro alemán desarrolló una parte importante de sus piezas para clave.
No es casualidad el que profundizase, precisamente en estos años, en la música instrumental.
La corte del príncipe Leopoldo de Anhalt-Köthen, en la que servía Bach como maestro de capilla, era calvinista y el servicio religioso era extremadamente sencillo, por lo que no requería de grandes composiciones.
De esta forma, el compositor se dedicó especialmente a la creación de música instrumental laica y, entre otras muchas piezas, dedica sus esfuerzos al clave, alumbrando la primera serie del Clave bien templado y las Suites Francesas; los seis Conciertos de Brandeburgo, los conciertos para violín y para dos violines y dos de las suites orquestales, entre muchas otras obras.
Las influencias italiana y francesa en la obra de cámara de Bach son significativas.
David Schulenberg, que firma las notas interiores del disco, lo describe de esta manera:
“Las sonatas y conciertos, que se escribían sobre todo para conjuntos de instrumentos de cuerda, llegaban de Italia, igual que los mejores violines, y que otros instrumentos de cuerda.
Las oberturas y suites, que consistían principalmente de danzas estilizadas, llegaban de Francia, donde se originaban los instrumentos de viento y teclado más en boga.”
No obstante, para Manfred Bukofzer (Music in the Baroque Era, 1947) Johann Sebastian Bach funde en estas suites las influencias francesa y alemana, creando un estilo propio y personal.
Deja de tener sentido hablar de estas influencias por separado, porque el compositor las ha asimilado y hecho suyas.
Es más, Bukofzer llega a afirmar que en la música que compuso Bach para clave en este periodo de Köthen “evitó el riesgo de sucumbir a las poderosas influencias italiana y francesa al asimilarlas con su tradición polifónica alemana”.
La fusión de estilos nacionales se convertiría en el sello de su música instrumental de madurez.
El núcleo de estas suites son cuatro movimientos que originalmente eran danzas: allemande, courante, sarabande y gigue.
Estas danzas en un principio eran interpretadas por la aristocracia francesa, pero fueron extendiéndose por toda la nobleza de Europa.
Conocerlas era un signo de cultura entre las clases altas.
Ignacio Prego fue el ganador en 2012 del galardón Wesfield Harpsichord International Competition y ha actuado en las principales ciudades de Estados Unidos, China, Japón, Italia, Costa Rica, Chile, Holanda, Portugal, Rumanía, Perú, Bolivia, Canadá y, como no, España.
Prego vive entre Nueva York y New Haven (Connecticut), dado que en esta ciudad desarrolla su labor docente en la prestigiosa Universidad de Yale, como “artista residente” y vocal coach del Institute of Sacred Music.
CANTUS RECORDS
Cantus se enorgullece de publicar este doble disco magistralmente interpretado por Ignacio Prego.
Las aproximadamente dos docenas de suites que Bach compuso para instrumentos de tecla fueron escritas para el estudio privado de sus alumnos, y predominantemente en estilo francés.
Estas suites francesas, que permanecieron sin publicarse hasta mucho después de su muerte, fueron compuestas tras la llegada de Bach a Cöthen, y de hecho el ciclo quedó completado sólo hacia 1725, una vez que se había trasladado a Leipzig.
En el proceso, Bach revisó el conjunto de seis suites francesas repetidamente, quitando o agregando algunas piezas y alterando alguno de los movimientos de manera bastante drástica.
En ellas Bach decidió decir más con menos, evitando el virtuosismo obvio en favor de la sutileza y el refinamiento, acercándose a lo que compositores como Couperin, cuya música Bach conocía bien, llamaban le bon goùt.
Bach empapa las danzas que componen estas suites con su particular contrapunto imitativo, su armonía inconfundible y su elegancia sobrenatural, que hacen de su lenguaje algo tan peculiarmente bachiano.
Ya le pudimos escuchar al clave como miembro de La Ritirata en el DVD “Concierto Barroco”, pero ahora podemos disfrutar de su extraordinario nivel como solista.
Ignacio Prego consigue el equilibrio perfecto en su interpretación de las suites francesas de Bach al revelarnos con claridad y luminosidad toda la arquitectura interna, la prodigiosa construcción de estas piezas, con su contrapunto imitativo y su característica armonía, y a la vez le aporta frescura y elegancia con su maravilloso sentido para la ornamentación.
El resultado es que seguramente estamos ante una de las mejores versiones de estas obras disponible en el mercado: emocionante, elegante, con una clara dirección musical, llena de matices expresivos y con tempi maravillosamente bien juzgados…
Esta edición especial de dos discos al precio de uno viene presentada en un precioso digipack doble con notas de David Schulenberg.
La grabación se realizó en una villa cercana Madrid, con una toma de sonido presente, clara y cálida a cargo de Federico Prieto.
Ningún amante de la música puede perdérselo…