El músico argentino Ramiro Albino está desarrollando una campaña de financiación colectiva (crowdfunding) para sacar adelante la edición de su “Guía para disfrutar más de la Música Antigua”, un libro que en palabras del autor “fue concebido pensando en el público, no en los especialistas sino en aquellos que disfrutan de los conciertos, discos o vídeos, y que quieren saber un poco más e ir más allá, esos que a veces sólo tienen para leer los librillos que acompañan a las grabaciones.

Luego el proyecto se transformó un poco, e incluí entre sus destinatarios a los colegas músicos que buscan iniciarse en la música antigua, tanto aquellos muy formados académica o técnicamente, como los más novatos, y que en su incursión en estos estilos necesitan saber algo más que las digitaciones, los modos de ornamentar o la manera de agarrar el arco de un instrumento antiguo”.

El autor es músico y director.

Sus conciertos, charlas y masterclasses lo han llevado a recorrer las Américas a través de numerosas giras, también visitó Europa, algunas veces para tomar clases y cursos, otras para tocar en festivales.

De modo paralelo trabaja como periodista de temas musicales y crítico en diversos medios de Argentina, viviendo el fenómeno artístico de modo permanente a uno y otro lado de los escenarios.

RAMIRO ALBINO

Hace mucho que me dedico a la música antigua.

Cuando era adolescente, toqué y canté por primera vez música del Renacimiento, en el colegio, y descubrí con gran emoción que eso era lo que quería durante el resto de mi vida.

Los caminos luego fueron azarosos, y no me decidía si dedicarme a la música o al mundo de la comunicación visual.

No pude elegir e hice las dos carreras: Diseño gráfico y Música.

Paralelamente a mi formación académica, de modo un tanto desordenado, fui tomando cursos de música antigua en mi país, en Brasil y en Francia, donde conseguí material bibliográfico y tratados.

Buscando trabajo para costear mis últimos años de estudio, me ofrecieron escribir sobre Barroco Latinoamericano, y hacer críticas de CDs de música antigua para una revista.

Sin darme cuenta estaba juntando ahí mis dos carreras: lo puramente musical y lo comunicativo (base fundamental del diseño).

Eso me llevó luego a tener un programa de radio y luego otro, simultáneo, y a trabajar como free-lance en periódicos y revistas, haciendo avances o críticas de conciertos, y así pude entrevistar a gente grandísima del mundo musical internacional que pasó por Buenos Aires (algunas entrevistas fueron verdaderas clases particulares sobre estilos musicales), y asistir gratis a numerosísimos conciertos que complementaron mi formación.

Escuché prácticamente a todos los más grandes y conocí así todo el repertorio.

Me formé musicalmente, y me perfeccioné en la comunicación.

Como público, o como crítico, me senté en las mismas butacas de esas salas donde toqué conciertos.

Todo este preámbulo sirve para explicar que conozco la música desde el ejercicio de descifrar una partitura para que llegue a ser un producto artístico, pero también desde el lado del público que entiende (o no) los conciertos, que se cuestiona cosas, que a veces quiere entender más, pero que, más allá de todo esto, disfruta de los conciertos.

Guía para disfrutar más de la música antigua

Su actividad artística y periodística fue testigo de la inmensa transformación que experimentó la Música Antigua en los últimos 25 años.

Ahora hay conciertos de música antigua en casi todas las ciudades, hay mucha más gente tocando, dirigiendo y produciendo, las partituras son más accesibles, se puede ver vÍdeos on line de conciertos espectaculares de los intérpretes más exquisitos o comprar discos de cualquier repertorio preclásico.

Sin embargo hay poco material bibliográfico con el que el público pueda formarse (¿Cómo hace la gente para aprender a escuchar esta música?), el que hay en general no está en castellano, y desde mi punto de vista, esto hace que el público no crezca tan rápido como la oferta artística.

El libro que escribió Albino propone una serie de respuestas a las preguntas que más le hicieron sus lectores y oyentes de radio, o aquellos que asistieron a sus conciertos (¿Por qué usar instrumentos antiguos o sus réplicas?, ¿Por qué los intérpretes leen de facsimilares?, ¿Cómo saber si una grabación es “buena”?), pero además propone una serie de reflexiones del autor sobre algunos temas que seguramente le interesarán al público, como la relación entre música y retórica durante el Barroco, el rol social del músico en la antigüedad, la relación entre las dimensiones y condiciones acústicas de una sala y la música que se interpreta ahí, o simplemente ¿por qué escuchar hoy música de hace varios siglos?

El libro está aún en proceso de financiación, y será editado en el mes de abril (en papel, y en formato ebook).

La información completa del proyecto y su proceso está en el siguiente link.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *