Javier Martos es un músico valenciano director de la Escuela Hispanoamericana de Música Antigua y del ensemble Ministriles de la Reyna. Igualmente, es el responsable de MiForte-NeuroEducación Musical, institución dedicada a ayudar y formar a músicos y maestros de instrumento a optimizar su rendimiento mediante la neuroeducación.

El jueves 23 de diciembre ofrece junto al profesor Facundo Costanzo una máster class a través del Centro Internacional de Música Medieval (CIMM) sobre el Cancionero Musical de Palacio, ese valioso manuscrito español que contiene música del Renacimiento, obras recopiladas durante un periodo de unos cuarenta años, desde el último tercio del siglo XV hasta principios del XVI, tiempo que coincide aproximadamente con el reinado de los Reyes Católicos. El manuscrito recopila un buen número de piezas, la mayor parte de ellas en castellano, aunque también contiene unas cuantas en otras lenguas, constituyendo una magnífica antología de la música polifónica de aquel periodo. Gran parte de las obras que aparecen son anónimas, aunque encontramos gran presencia de piezas de Juan del Encina, Francisco de Peñalosa y de muchos otros.

Hemos hablado con Javier Martos tanto sobre el Cancionero como sobre diversos aspectos relacionados con la formación e interpretación de la música antigua.

¿Qué nos puede enseñar la música que contiene el Cancionero Musical de Palacio sobre el espíritu del principio del Renacimiento español? ¿Cómo nos puede enriquecer 500 años después?

Me parecen dos preguntas muy interesantes. Se podría hacer hasta un artículo e incluso una máster class sobre ello, dan para mucho.

Desde mi punto de vista, y sin ánimo de molestar a nadie, pienso que serían más para un musicólogo que para un maestro de ministriles. Yo aporto mi experiencia a un “Taller de Interpretación del Cancionero de Palacio”, según lo que dicen los tratados y fuentes con instrumentos copia de los originales de museo.

Y considerando que esta entrevista viene dada a propósito del “Taller de Interpretación”, pienso que contestando a ellas como lo merecen, podría desviar la atención del futuro alumnado al que apuntamos, confundiéndoles respecto al objetivo práctico del taller y atrayendo a un alumnado con un perfil y visión más musicológica.

Además, pienso que hay personas mucho más idóneas para contestar estas preguntas de un modo más adecuado y como merecen los lectores.

El Cancionero de Palacio está integrado en su mayoría por piezas de compositores españoles, aunque las capillas reales -especialmente desde la llegada de los Austrias al trono- estaban en gran parte compuestas por músicos extranjeros. ¿Por qué consideras que la música renacentista y barroca netamente española no ha sido tradicionalmente tan conocida ni apreciada como la de otros países europeos, como, por ejemplo, la italiana, la francesa o la de los Países Bajos?

En mi opinión, creo que, en su momento, la música del Renacimiento netamente española era muy valorada. Cuanto más tiempo paso contrastando las fuentes, es muy evidente la admiración que sentían hacia ella dentro y fuera de nuestras fronteras.

Otra cosa ya es cómo durante el paso de los siglos se ha ido diluyendo, cómo se la ha tratado, llegando hasta casi el olvido, y más en nuestro país.

Todo ello, y vuelvo a darte mi opinión, que es una de tantas, viene dado porque no hemos investigado y divulgado nuestro patrimonio como lo han hecho otros países. Incluso han tenido que venir desde fuera musicólogos para rescatar nuestra música y luego grabar discos (al estilo que ellos consideran) para darnos a conocer.

Mientras, aquí, pasa un carro… y al español que pretende entrar en archivos se le ha puesto muy difícil, y es una pena.

Afortunadamente, desde hace años, ya somos suficientes las personas que estamos en ello y a día de hoy, sin prácticamente ayuda, solo por el amor hacia nuestra cultura y herencia estamos consiguiendo interpretar nuestra música como dicen los tratados de la época españoles.

Esto marca la diferencia respecto a la visión extranjera de cómo interpretar nuestra música según su criterio, lo cual ha creado una especie de memoria auditiva en alumnos, profesores y público, alejada de lo que dicen las fuentes.

Por esta razón, la iniciativa de Facundo Costanzo aporta salud y una nueva, pero auténtica, visión de cómo podría interpretarse nuestra música según lo contemplado en nuestras fuentes. Obviamente, teniendo en cuenta el tiempo que nos separa y muchas más cosas, pero, al fin y al cabo, mucho más aproximado y auténtico que lo que se ha hecho hasta ahora.

Ahora ya estamos dándolo a conocer desde ese lugar y creo que en un futuro ya no va a haber ese desconocimiento, siendo nuestra música renacentista conocida y apreciada como merece.

El Cancionero está muy influido por la música popular -canción trovadoresca, romances…-, ¿en qué medida consideras que la corte y la nobleza asumía y apreciaba las formas musicales más llanas y menos cultas?

Sinceramente, no tengo ni idea de cómo podrían apreciar la corte y la nobleza las formas musicales “más llanas”, si hay alguien que conoce alguna fuente donde se hable sobre ello, estaría muy agradecido de que me la hiciera llegar. Pero teniendo en cuenta la naturaleza del ser humano creo que seas “noble” o no, la música se siente, pasando por el corazón y ahí es donde trasciende.

Creo que como hoy en día, y vuelvo a dar mi opinión, la cual es una entre muchísimas, a algunos les gustaría más una cosa u otra, dependiendo de lo que tuvieran acceso a escuchar, sus gustos, lo que le transmite, y no tanto en si es más o menos “culta”.

Por lo tanto, considero que se podría aplicar también para aquel momento, sean “nobles” o no, el dicho “De gustibus non est disputandum”… “Para gustos, los colores”.

¿Crees que hay en este momento, en nuestro país, un clima propicio para que los alumnos de conservatorios superiores y centros de música empiecen a entender de dónde viene todo aquello que estudian con sus instrumentos actuales?

Considero que sí, ya que los alumnos y aficionados tienen mucha hambre de ello.

Solo hay que ver cómo han acogido alumnos, aficionados y profesores en España y América el documental “Ministrils, viatjers del temps a través de la música”, para darnos cuenta de que en su mayoría no tenían ni idea de ese mundo y que tienen hambre de mucho más.

Desafortunadamente hay un freno, que viene de las mismas instituciones y responsables de las mismas, que por su desconocimiento en unas ocasiones y en otras por cuidar su “quiosquito”, anulan toda iniciativa que no les beneficie para su carrera, y claro, así es muy complicado.

Aun así, por mucho que lo intenten, no se puede tapar el sol con la mano, y el cambio llegará.

¿Consideras que es un buen ejercicio para ampliar la visión y no acotar la historia de la música que finalmente recibimos con un sesgo bastante pronunciado en términos de épocas y estilos?

Por supuesto que sí. Yo vengo del mundo sinfónico y descubrir éste nuevo pero antiguo mundo maravilloso me abrió los ojos aportándome muchísimo.

Normalmente, músicos y público se ocupan de una parte muy reducida del mundo de la música, obviando o menospreciando en ocasiones el valor real del resto.

Por lo tanto, considero que es un deber proporcionarles más herramientas y mostrarles que no solo existe carne con patatas, hay muchos más alimentos saludables, pero para ello se les tiene que mostrar para que puedan elegir con criterio y libertad.

¿Cuéntanos qué vas a ofrecer a los alumnos en la asignatura que impartes en el marco académico y formativo del Centro Internacional de Música Medieval (CIMM)?

En primer lugar, me alegra mucho poder formar parte del cuadro de profesores del CIMM y estoy muy agradecido a Mara Aranda por haber pensado en mí para sumarme al equipo.

A los alumnos del CIMM les ofrezco mis conocimientos y experiencia en los instrumentos de metal en el Medievo y Renacimiento.

Estos instrumentos son el añafil, la trompeta en S, trompeta de ministriles y el sacabuche. Todos ellos han seguido una línea de transformación a través de los siglos al servicio de la música y diferentes necesidades.

Entre otras muchas cosas, les ayudaré a elegir el instrumento más apropiado (si aún no tienen), mostrándoles el equipo a utilizar más próximo a los originales encontrados hasta hoy en día, boquillas, etc…

Con el añafil, aprenderán a saber cómo abordar las piezas del S.XIII, como las “Cantigas de Alfonso X el Sabio”, e integrarse en un conjunto que las interprete. También les mostraré qué funciones tenía y los recursos necesarios teóricos y técnicos que necesitan para poder llevar a la práctica el repertorio medieval en ministriles altos y con voces de la época.

La trompeta en S, básicamente sería el mismo aprendizaje que con el añafil, ya que, en definitiva, es el mismo instrumento, pero con dos partes dobladas en forma de U para un manejo más ergonómico, por esta razón apareció a mediados del siglo XIV como un instrumento a partir del añafil, el cual atendía justamente a éstas necesidades.

Respecto a la trompeta de ministriles, aprenderán sobre su uso con ministriles altos y junto con voces desde finales del XIV y S.XV.

Y finalmente, con el sacabuche (que es la evolución de la trompeta de ministriles) aprenderán a interpretar la música renacentista tanto con ministriles como en polifonía sustituyendo o doblando voces.

Éstos serían los contenidos, de un modo más específico:

 

  • Orígenes, música instrumental y vocal. Aproximación a los instrumentos y contexto histórico. El sonido del añafil, trompeta en S, trompeta de ministriles y sacabuche.
  • Equipo a utilizar. Boquillas históricas, añafil, trompeta en S, trompeta de ministriles, modelos de sacabuches, fabricantes más importantes.
  • Trabajo técnico. Trabajo específico, utilizando fuentes musicales de la época, aplicado al añafil, trompeta en S, Trompeta de ministriles y sacabuche para la interpretación de la música medieval y renacentista.
  • La articulación. Técnica de articulación según los tratados. Ejercicios y aplicación sobre piezas y extractos de la época.
  • Fraseo. Cómo interpretar la música medieval y renacentista con los instrumentos de viento metal. La estética vocal. Aplicación sobre piezas de la época.
  • Trabajo de conjunto y polifonía. Cómo abordar el trabajo de conjunto y la polifonía de la época según las fuentes.
  • Tempo: Cómo abordar con el tempo y proporciones correctas las piezas de la época.
  • Afinación histórica: La a 465/523. Punto alto y punto bajo.
  • Notación: facsímiles y cómo leerlos.
  • Improvisación: en la práctica vocal e instrumental en el medievo y renacimiento con los instrumentos de viento metal.

Muchas gracias por la entrevista y espero haber conseguido que me conozcáis mejor y satisfacer vuestra curiosidad respecto a la parte que nos ocupa, tanto para el Taller de Interpretación como para la asignatura que imparto en el CIMM.

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