Nos hacemos eco de esta interesante entrevista realizada por Ylenia Álvarez, periodista por la Universidad Carlos III de Madrid y titulada profesional de Música… Comenzamos:
Jordi Savall (Barcelona, 1941) es un hombre tremendamente ocupado.
Estos días está ofreciendo su talento en Francia y hace un mes llegaba a Madrid procedente de Nueva York el mismo día que tenía su concierto en el Auditorio Nacional para hacer un auténtico homenaje a la música del Nuevo Mundo.
Sin descanso se sumergía en un ensayo con la agrupación mexicana Tembembe Ensamble Continuo con la que establece un auténtico diálogo musical entre la España antigua y las tradiciones barrocas y vivientes huasteca, llanera y jarocha de la América de los siglos XVI, XVII y XVIII.
Esta entrevista se establece cual encaje de bolillos en una agenda que le deja menos de 20 minutos para descansar antes del concierto. Así de generoso es Jordi Savall.
Entregado a la música antigua desde hace más de 40 años, es violista de gamba, director de las formaciones Hespèrion XXI, la Capella Reial de Catalunya y Le Concert des Nations, y sin duda alguna, uno de los musicólogos españoles de más prestigio internacional.
Savall es a la música antigua española lo que el Departamento de Investigación de la Biblioteca Nacional al castellano antiguo o el de Restauración del Museo del Prado al arte.
En las distancias cortas el maestro tiene una mirada tierna y apacible, que esconde bajo unas gafas redondas y pequeñas propias de otra época.
Es de esas personas que desprende una inmensa sabiduría en cada gesto, una percepción que se reafirma con cada palabra.
Habla bajito, con un acento del mundo (no es catalán, no es francés ni inglés), con vocabulario sencillo y con toda la tranquilidad del mundo.
Intérprete, director, divulgador, investigador… ¿en qué faceta se siente más cómodo?
Músico. Es el nombre que incluye todas ellas. Como director soy músico, como violista soy músico, como investigador es mi parte musical la que investiga, la que enseña, la que trabaja, la que graba…El núcleo que hace mover todo es la música.
¿Se siente defensor de la música olvidada?
Siempre he sido un amante más que un defensor. Nadie ha atacado a la música en sí.
Lo que sí he sido es un divulgador de instrumentos olvidados como la viola de gamba, y sobre todo, de músicas de todas las épocas que necesitamos para nuestra alma, para nuestra vida y para nuestro espíritu por su belleza, por lo que nos explican de nuestro pasado: de esas vivencias y de esas emociones únicas que ya no se repetirán nunca.
¿Cómo siente usted la viola de gamba, el instrumento que especialmente ha recuperado?
La viola de gamba es quizás de todos los instrumentos el que siempre se ha considerado, entre el Renacimiento y el Barroco, como el instrumento más cercano a la voz humana.
Hoy en día en su lugar hablamos del violonchelo, pero no hay que olvidar que empieza a tener una voz solista a partir de la segunda mitad del siglo XVIII, cuando la viola de gamba comienza ya su ocaso.
Así, durante todos los siglos XVI, XVII y parte del XVIII la viola de gamba es el instrumento que exprime con más belleza las emociones del ser humano: la dulzura, la tristeza, la melancolía… Me gusta recordar como ejemplo más característico La Pasión Según San Juan de Bach, donde la viola de gamba toca una sola aria.
En esta obra de Bach es donde está todo terminado, donde Jesús muere.
Es la viola de gamba la que tiene la voz y la que tiene que dialogar con el contratenor para expresar toda esta tristeza y todo este momento tan emocionante.
Entrevista Jordi Savall (2º Parte): Música Antigua vs otras artes
Tenho quase todos os discos …
Alazán Bar Abba
Me gusta muchísimo la música que hace Jordi Savall.
Un poco de todas esas facetas es el sello Savall, permeando en el tiempo, desafiando, colocando su vida al servicio de la música antígua y medieval.
buena la entrevista, gracias por pasármela