Os presentamos a la musicóloga Agniezska Budzinska, amante de la música antigua, profesora de canto gregoriano, cantante de música medieval e intérprete de Arpa Medieval.
En 2007, la cantante Agniezska Budzinska (Polonia, 1973) participó en el Pórtico de Zamora con su grupo Ensemble Peregrina.
Ahora regresa, «honrada», en la segunda jornada del festival Domo Musical que tiene lugar este viernes en la Catedral de Astorga, a las 22.00 horas.
Agniezska detalla su carrera y explica su compromiso con la música antigua.
-¿Cómo fueron sus inicios en la cultura de la música?
-Empecé a estudiar piano cuanto tenía cinco años, desde entonces y hasta que cumplí siete, continué la educación profesional en la escuela de música de Primaria y Secundaria.
Siempre estaba cantando en diversos coros hasta los 16, cuando empecé a tomar lecciones de canto consciente de que mi camino iba a ser la música antigua.
– Entonces… ¿continuó con sus estudios?
-Me gradué en el Departamento de Piano de Szczecin y en Musicología en la Universidad de Poznan.
Entonces, fui a Basilea para estudiar canto antiguo en el Departamento medieval de la famosa Schola Cantorum de Basilea.
-¿Por qué dirigió su carrera hacia el canto medieval?
-Desde muy niña estaba completamente entregada a las profundas e inspiradoras interpretaciones de Benjamin Bagby y luego de Barbara Thornton, directores del grupo Sequentia.
Me apetecía interpretar esta música maravillosa y saber más de ella.
Siempre me he sentido muy ligada a los textos y a la literatura antiguos, y la música medieval está fuertemente conectada e incrustada en el mundo literario.
Incluso tomé estudios de musicología para obtener el doctorado con la tesis sobre los motetes del siglo XIII, así que el acercamiento intelectual es también muy importante para mí.
Un intérprete de música medieval es un investigador y un descubridor, se necesita un espíritu creativo, un conocimiento profundo y una precisión analítica al mismo tiempo.
Se necesita familiarizarse con las lenguas que ya se han extinguido, tener conocimientos de paleografía, desarrollar la intuición para la mente medieval y sentirse cómoda con la música que en principio puede parecer poco espectacular, pero cuya interpretación es muy dura.
-¿Qué tiene de especial el arpa para usted?
-El arpa, en sus diferentes formas, es uno de los instrumentos conocidos más antiguos para casi todas las culturas a lo largo de siglos.
Para mí es una bandera de la música medieval (el rey David siempre aparece ilustrado con ella) y un bello instrumento para acompañar mi voz.
-Da clases de canto gregoriano, ¿resulta complicado cantar como los monjes medievales?
-Bien, no todos los monjes en la actualidad cantan como los frailes medievales. He visitado muchos claustros y oído a muchos monjes y monjas cantar.
Las interpretaciones del canto gregoriano son múltiples en la actualidad, tantas como en la Edad Media.
No hay una tradición única y nunca la habrá.
Enseñar canto gregoriano hoy significa elegir una estética en el campo de la paleografía y toda la información que nos sea posible.
De cualquier modo, siempre nos quedamos en la especulación y es increíblemente importante transmitir esta verdad a los estudiantes.
-¿Qué significa la música antigua para usted?
-La música antigua es un maravilloso campo de bellos textos e historias, melodías y armonías.
Creo que, a menudo, nos cuenta verdades universales y nos enseña mucho sobre la naturaleza humana de una manera sencilla pero primorosa.
-¿Por qué decidió emprender la aventura del grupo Ensemble Peregrina?
– Los miembros de Ensemble Peregrina tienen la necesidad de hacer música juntos y mostrar su amor por los antiguos, la mayoría litúrgicos, repertorios.
Sentí que había mucho por descubrir al público de ahora así que impulsé el grupo y me enfrenté al problema de encontrar las piezas más desconocidas de cada repertorio.
-Háblenos de sus compositores preferidos.
-¡Me gustan demasiados! Y muchos de los compositores medievales eran anónimos.
Cuando dejamos de lado la música antigua, tengo que mencionar a Wagner, Puccini, Finzi, Vaughan Williams, Szymanowski y Respighi.
-¿Y qué opina de los españoles?
-Tengo muchos compañeros españoles y siempre nos traen mucha de la pasión y de las ideas en la composición.
Y España siempre ha producido muchos compositores talentosos.
El reciente trabajo de Peregrina «Cantrix» está dedicado a los repertorios desconocidos del convento de Santa María de Sigena (Huesca), con algunas piezas de Las Huelgas.
¡Las composiciones son maravillosas!
-¿Se siente especial cantando en uno de esos templos, un monasterio o una catedral?
– Siempre. La música que suelo interpretar pertenece a estos lugares y allí emerge la acústica y su espíritu de intimidad entre los muros.
-La cultura en Europa está en crisis, ¿cuál es la situación en Polonia o en Suiza, países que conoce a la perfección?
-Bien, la crisis ciertamente no ha escapado a ningún país con actividades culturales.
Esto es fácil de comprobar en mis dos países.
Las músicas que escapan a la corriente general han sido víctimas de los recortes.
Afortunadamente, todavía hay gente apasionada y organizaciones que luchan por la financiación y apoyan eventos que se escapan de la cultura principal.
– ¿Es el caso del ciclo Domo Musical?
-Ya canté con Peregrina en el festival Pórtico de Zamora hace varios años y me emocionó escuchar a Alberto Martín hablar de este nuevo ciclo.
Me siento absolutamente honrada de ser invitada a Zamora de nuevo y de ser capaz de tocar en un lugar tan noble como la Catedral.
Entrevista realizada por JOSÉ MARÍA SADIA | OpiniondeZamora.es