La tercera edición de Mare Musicum, el Festival de Música y Danza Antiguas de Roquetas de Mar, concluyó anoche en el Anfiteatro con un auténtico broche de oro, como fue la actuación de los alumnos que han participado en los cursos desarrollados durante este ciclo.
La producción del Festival sirvió para despedir el programa con ‘La Música del Códice Trujillo’, que integró piezas musicales y danzas en los que intervinieron más de cien intérpretes, muchos de ellos de corta edad.
Esta edición ha sido un éxito en todos los sentidos, incluyendo también la respuesta del público en los conciertos, como señala el director de este ciclo, Carlos González, quien añade también a esta valoración positiva el resultado de los cursos y del simposio.
El responsable de Mare Musicum subraya especialmente como la respuesta del público ha venido a confirmar el arraigo de esta propuesta cultural tan especializada en Roquetas de Mar.
Como una prueba evidente de este hecho, González cita los llenos registrados en el Castillo de Santa Ana, aún teniendo en cuenta que este año se ha cobrado la entrada, aunque con un precio bastante asequible. Esta decisión se adoptó por la necesidad de que los conciertos más exigentes en cuanto a la atención del público se celebraran en un recinto cerrado y sin interferencias de ningún tipo.
Así, la velada ofrecida por Los Ministriles de Marsias, puso apreciarse con la adecuada concentración de músicos y espectadores. En idénticas condiciones se celebraron los conciertos del Dúo Marizápalos formado por Cristina Bayón y Aníbal Soriano y la del Coro de Obaroq, bajo la dirección de la citada soprano.
González también destaca la importante respuesta del público en otros escenarios, como es el caso de la iglesia de Aguadulce, donde tuvo lugar el concierto de la Joven Orquesta Barroca de Roquetas, que dirige Alejandro Torrente.
La posibilidad de utilizar este templo ha merecido un agradecimiento muy especial por parte del Festival.
Esta fructífera y creciente conexión con el público puede ser una de las razones para que Mare Musicum se convierta en una cita destacada en el panorama de la música antigua en España. A este relevante aspecto , Carlos González suma el hecho de que Mare Musicum incluya la Danza.
Con ser esta una característica bastante original, el director Festival explica al respecto, que el propósito de cuantos lo hacen posible es mostrar con autenticidad como se vivía la música en el final de la Edad Media y en los siglos posteriores, cuyas composiciones estaban íntimamente ligadas al baile en muchos casos.
Música y teatro El siguiente paso, es conectar la música con el teatro, devolviendo a la vida los intermedios musicales de las piezas del Siglo de Oro. Los vínculos y complicidades de Mare Musicum con las Jornadas de Teatro, representan una oportunidad para esta convergencia, según Carlos González.
También valora el director la valiosa aportación del simposio, cuyas actas van a ser editadas, con el fin de que su proyección esté en consonancia con relevancia de los temas que este año se han tratado.
Carlos González y sus compañeros de singladura está ya pensando en la próxima edición, sin dejar a un lado el curso de luthiers que comienza mañana, impartido por él mismo y en el que participan alumnos de varios países.
Jacinto Castillo | LAVozDeAlmeria.es