Gradualia reivindica la enorme importancia y popularidad de la que gozaron el oficio y la misa de difuntos en la Península Ibérica.
Los mejores polifonistas ibéricos han compuesto excelsas partituras basándose en el cantus firmus del propio de difuntos, haciendo hincapié en el profundo significado y trascendencia que tiene para el ser humano la pérdida de un ser querido, y el deseo y la esperanza de que trascienda al más allá y disfrute de la vida eterna.
Para ello han ideado un Oficio y una Misa de difuntos imaginarios, en donde cada fragmento de ellos corresponde a un autor, configurando así una idea global de las soberbias composiciones que se desarrollan en la península desde comienzos del siglo XVI hasta bien entrado el siglo XVII.
El Oficio de difuntos consta de muy distintas composiciones en cuanto a número y tipo, dependiendo de la tradición de cada lugar, autores o las praxis de cada iglesia local.
El más completo lo elabora el músico de Badajoz Juan Vásquez (ca. 1505 – 1563) en su Agenda defunctorum de 1556, de la que escucharemos su invitatorio a modo se fabordón y su motete Sana me, Domine.
Los otros autores que completan nuestro particular oficio son Cristóbal de Morales, ejemplo a seguir en este género entre los polifonistas ibéricos, el madrileño (nacido en Vallecas) Estêvão Lopes Morago (ca. 1575 – 1630), que desarrolló su actividad musical en Portugal (entre Évora y Viseu) y el sevillano Alonso Lobo (ca. 1555 – 1617), una de las figuras más importantes de la música del Siglo de Oro español.
Gradualia ofrece el viernes 2 de noviembre en Badajoz, a las 20:30 h. el concierto titulado ‘In Pace’, en el Salón Noble de la Diputación Provincial, dentro del Ciclo ‘Carmina Antiqva 2018’, con entrada libre hasta completar el aforo.
En esta peculiar Misa se podrá disfrutar de música de autores como Estêvão de Brito (ca. 1570 – 1641), portugués que desarrolló su carrera musical entre las catedrales de Badajoz y Málaga como maestro de capilla, o Hernando Franco (1532- 1585), nacido en Galizuela (Badajoz) pero que tras estudiar a Segovia emigra a Guatemala y México, en donde se conservan sus composiciones que trasladan la sabiduría polifónica europea al Nuevo Mundo.
Por otro lado de composiciones y de autores de lugares tan aparentemente lejanos como el francés afincado en la Catedral de La Seu d’Urgell (Lérida) Joan Brudieu (1520 – 1591), el sevillano Francisco Guerrero (1528 – 1599) o el abulense Tomás Luis de Victoria (1548 – 1611).
No debemos olvidar que todos ellos eran minuciosamente instruidos en la estricta tradición compositiva del contrapunto, y que muchos de ellos conocían las mismas obras, los mismos autores y las mismas tradiciones europeas.
A todo esto influyen sobremanera los archivos musicales catedralicios y los de las familias de la nobleza amante de la música como la Corte Ducal de los Braganza en Vila Viçosa (Portugal), en donde músicos como Brito, Victoria o Vásquez tuvieron contacto directa o indirectamente.
La celebración cuenta además con composiciones de Sebastián de Vivanco (ca. 1551 – 1622), abulense del que se conservan dos formidables libros de coro con bastantes de sus composiciones en el Monasterio de Guadalupe (Cáceres), del salmantino Juan de Esquivel (ca. 1470 – 1514) de quien conservamos importantes composiciones en la Catedral de Badajoz y en las localidades cacereñas de Plasencia y Coria.
No debemos olvidar la inclusión en este programa de Pedro de Escobar (ca. 1465 – 1535), natural de Oporto, que desarrolla su labor principalmente en España, en las catedrales de Sevilla, Toledo y Tarazona y del cual se conservan obras profanas en el Cancionero de Elvas, ya que fue el primer compositor ibérico conocido en escribir la música polifónica para la Misa de Réquiem, hacia 1504.
Éste será un viaje espiritual a través de fantástica música para conmemorar y honrar las almas de todos nuestros seres queridos, precisamente el 2 de noviembre, Festividad de los Fieles Difuntos.
El ensemble Gradualia, creado y dirigido por Simón Andueza se dedica al estudio e interpretación de la música antigua.
Sus componentes gozan de una sólida experiencia en el campo de la interpretación histórica y entre ellos podremos escuchar a voces conocidas como la de la soprano cacereña Delia Agúndez.
En esta ocasión la formación estará compuesta por:
Delia Agúndez, soprano
Ana Cristina Marco, alto
Diego Neira, tenor
Simón Andueza, barítono y dirección
PROGRAMA
AD OFFICIUM
– Invitatorio: Regem cui omnia vivunt. Juan Vásquez (ca. 1505 – 1563). Valladolid*
– Lección: Parce mihi, Domine. Cristóbal de Morales (1500 – 1553). Sevilla
– Responsorio: Credo quod Redemptor. Alonso Lobo (ca. 1555 – 1617). Madrid
– Responsorio: Peccantem me quotidie. Estêvão Lopes Morago (1575 – 1630). Viseu
AD MISSAM
– Introito: Requiem aeternam. Tomás Luis de Victoria (1548 – 1611). Ávila
– Kyrie. Joan Brudieu (1520 – 1591). La Seu d’Urgell
– Gradual: Requiem aeternam. Pedro de Escobar (ca. 1465 – 1535). Tarazona
– Tracto: Sicut cervus. Juan Vásquez. Valladolid
– Ofertorio: Domine Jesu Christe. Francisco Guerrero (1528 – 1599). Sevilla
– Sanctus. Juan de Esquivel (ca. 1470 – 1514). Salamanca
– Hei mihi, Domine. Pedro de Cristo (ca. 1550 – 1618). Coimbra
– Versa est in luctum. Estêvao Lopes Morago. Viseu
– Sana me, Domine. Juan Vásquez. Valladolid
– Circumdederunt me. Estêvão de Brito (ca. 1570 – 1641). Málaga
– Agnus Dei. Tomás Luis de Victoria. Ávila
– Responsorio: Memento mei, Deus. Hernando Franco (1532- 1585). México
– Salmo: De profundis clamavi. Sebastián de Vivanco (ca. 1551 – 1622). Salamanca
*Las ciudades indican en dónde se encuentra el manuscrito musical de cada pieza.
Más información en Indiccex.
Os dejamos este vídeo para que podáis conocer un poquito más alfantástico Ensemble Gradualia.
Alonso Lobo no era Sevillano. Era Ursaonés. Y nació en 1555.
Estimado José, muchas gracias por la corrección. Queda modificado. Un saludo.