La clavecinista, bailarina histórica y directora artística Pilar Montoya hará viajar al pasado, durante dos días, a la localidad malagueña de Vélez Blanco gracias a su participación en el XIII Festival de Música Renacentista y Barroca ‘Gobierno de la virtud y deleite de la música’.
En el Teatro de la Villa, Pilar Montoya ofrecerá una conferencia ilustrada con imágenes, audiciones musicales y demostraciones de danza para disertar sobre ‘Ese honorable ejercicio. El papel educativo, lúdico y social de la danza en el Renacimiento y el Barroco’.
Se trata de una auténtica forma de conocer estas disciplinas, ya que la profesora Montoya ha basado sus estudios en documentos y fuentes originales.
La charla-coloquio tendrá lugar el 31 de julio a partir de las 19 horas.
Por otra parte, en el mismo marco del XIII Festival, el grupo de danza histórica Los Comediantes del Arte, bajo la dirección de Pilar Montoya, ofrecerá un espectáculo directamente llegado de la época de Cervantes.
Bajo el título ‘Con mudanzas y meneos. Músicas y danzas de la época de Cervantes’, Los Comediantes del Arte combinarán música y danza española e italiana del siglo XVI y principios del XVII, mostrando la indumentaria propia de la época.
Con un discurso ágil, ameno y muy didáctico, habitual en Los Comediantes del Arte, el público podrá sumergirse en el mundo musical y coreográfico que conoció Cervantes.
Todo ello gracias a una recopilación de piezas instrumentales y de baile recreados por los intérpretes mediante un trabajo exhaustivo de investigación, fiel a la realidad histórica.
El espectáculo tendrá lugar el viernes, 1 de agosto, a partir de las 21,30 horas en el incomparable escenario del Patio del Castillo de Vélez Blanco
El trabajo de Investigación es una actividad académica muy seria que primero se demuestra con la publicación de artículos científicos en revistas científicas de alto impacto.
Dicha actividad -denominada Coreología- es propia de coreólogos, al igual que la musicología es propia de musicólogos.
Una excelente intérprete musical, con conocimientos coreográficos, pero sin los estudios de danza pertinentes (los estudios de danza duran 14 años al igual que los de música) puede ser tan coreólogo como musicólogo sería un interprete de danza con conocimientos musicales que «reconstruyera» obras musicales de la época de Cervantes, con los instrumentos originales, e interpretara dicha música con otros intérpretes coreográficos poseedores de entrenamiento musical básico (menor del grado elemental).
Espero haberme expresado con la claridad deseable. Porque en caso contrario comenzaré a colocarme el atributo de «musicólogo» e investigador en música antigua.